El primer domingo de Cuaresma, la Palabra Sagrada en su Evangelio nos lleva a enfrentar el problema de la maldad con intención de entender por qué en este tiempo de penitencia hemos de seguir los pasos de Cristo.
No es otro que el mismo diablo, quien en la Sagrada Escritura, tienta a Jesucristo durante la cuarentena de días que Este está orando en el desierto. Sigue leyendo